NIÑOS. La procesión del Señor de los Corazones

Roberto Ignacio Círigo

El 24 de julio de cada año en Huajuapan hay una procesión muy grande con la imagen del Señor de los Corazones. Cada año, mi papá la transmite por la radio.
El año pasado yo lo acompañé desde la esquina de 5 de febrero y Morelos hasta el Sagrario, y aunque fue muy cansado me pareció muy bonito. Creo que nunca había visto tanta gente junta.
Este año no fui porque no estaba en Huajuapan, pero platiqué con el padre Porfirio Franco Ortiz Osorio, que es el párroco del Sagrario Diocesano, y él me explicó que el Señor de los Corazones es una imagen muy bonita que desde hace más o menos 300 años está en Huajuapan.
Me platicó también que la gente le tiene mucho cariño porque en la Guerra de Independencia, cuando Huajuapan sufrió el sitio más largo que ha habido en México, el Señor de los Corazones intervino para que D. José María Morelos y Pavón viniera a ayudar a la gente y a liberar esta tierra.
Por eso, cada año se hacen en Huajuapan una feria muy grande y un novenario en honor al Señor de los Corazones, donde todas las noches se queman castillos y toritos de luces, y el 23 de julio viene mucha gente de Huajuapan que vive en otras ciudades.
Algo que me gusta mucho de la procesión es que toda la gente se levanta muy temprano para barrer las calles por donde pasa la imagen y hacer unas alfombras de aserrín con muchas figuras de colores. Creo que es el día en que la ciudad se ve más bonita.
El padre Porfirio me dijo que al Señor de los Corazones la gente lo quiere mucho, pero a él le daría mucho gusto que los niños también lo quisiéramos, que nos acordáramos siempre de él y que nos encomendáramos a él todos los días de nuestra vida.
El Señor de los Corazones está en el Sagrario Diocesano, que es el templo que está a un lado de la Catedral, y ahí lo podemos visitar todos los días del año.